Thursday, August 6, 2020

Calles y callejones de Camagüey: Callejón de Francisquito, Doctor Jorge Rodríguez (por Marcos A. Tamames-Henderson)

Nota del blog: Cada jueves se publica en el blog, gracias a la cortesía de Marcos Antonio Tamames-Henderson, una selección de su libro Calles y callejones de Camagüey. Entre la leyenda y la historia.  


Según el plano de la villa de 1814 el callejón de Francisquito nacía en Santa Rosa y tras cruzar Reina culminaba en San Juan. En la segunda mitad del siglo, con la construcción de la cárcel de la ciudad en 1859, se prolongó al este dando cierre a los callejones de Owen (D) y de la Cárcel (D); a la calle Jesús María (D) y terminaba en Nuestra Señora del Rosario. Pero su extensión no culminó ahí, pues en 1939 absorbió el callejón de Quiñones, que de forma independiente y con raíz en el camino de Hato Arriba ya existía a finales del siglo XVIII. En este nuevo tramo el callejón otorgó cierre a las calles de la Palma y Verges, para terminar en Avenida Central del reparto La Norma. Con la urbanización del reparto Boves se hizo presente bajo el nombre Prolongación de Francisquito irrumpiendo en Santayana para cortar las calles de la Carnicería o Contaduría y San Ildefonso, y finalizar en Roosevelt.

Acerca de su nombre Lasqueti apunta que se debe al hecho de haber vivido en este callejón un artesano llamado Francisco, a quien los vecinos reconocían por su diminutivo. Los documentos atesorados en el Archivo Histórico Provincial indican otra posibilidad: el Fondo de Anotaduría de Hipotecas reconoce en su índice el nombre de Cano, información que encuentra argumento en el uso de ese apellido entre los que tenían en él propiedades, como es el caso, entre 1838 y 1842, de don Manuel Cano. 

Los primeros pasos para modernizar su nombre se ponen de manifiesto en 1911, a consecuencia de la intención del concejal Armando Labrada Cantos de sumarse a la celebración por el aniversario de la instauración de la República, el 20 de Mayo. Una vez logrado algunos cambios en la sesión del 18 de abril, aparece la propuesta de cambiar Santa Rosa, Popular (callejón de la Merced), San José y de Francisquito, correspondiendo a este último General Rayan. El 14 de junio retoma el tema el concejal Mario Boza Masvidal en unión de Roberto Waring, mas vuelve a quedar pendiente hasta la sesión de dos días después, el 16 de junio, donde se acuerda colocar el General Rayan a San José y a de Francisquito Brigadier Reeve. Pero el acuerdo quedó engavetado.
 
Ocho años más tarde, en la sesión del 21 de mayo de 1919, el concejal Emilio Varona Lastre sugiere “conmemorar la memoria de los que en vida fueron médicos queridos de esta localidad, y que fallecieron a causa de la pasada epidemia de la influenza y se le pongan a las calles de Jesús María y José y Francisquito, ambas de esta población, los nombres de Pablo Lombida y Jorge Rodríguez, respectivamente”. De manera inmediata se tomó el acuerdo que fue firmado por el alcalde municipal Andrés Morán el 26 de mayo; de modo que las placas de Francisquito pasaron a llevar el texto Dr. José Rodríguez “para recordar a ese joven médico camagüeyano fallecido el 13 de octubre de 1918 a los 26 años, víctima de la influenza que contrajo mientras luchaba por arrebatar de la muerte a los atacados por esa enfermedad”. 

Los nombres Francisquito y Quiñones siguen orientando a vecinos y forasteros. De sus cuadras solo las limitadas por Santa Rosa y de la Palma participan del Centro Histórico.

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Marcos Antonio Tamames-Henderson (Jamaica, Guantánamo, 1961). Lic. Historia del Arte (1997), MSc. en Historia del Arte y en Conservación y Rehabilitación de Centros Históricos (2007). Miembro de la Uneac, Unaic, Unhic. La Editorial Ácana ha publicado sus libros De la Plaza de Armas al Parque Agramonte. Iconografía, símbolos y significados (2001, 2da ed. 2003); Tras las huellas del patrimonio (2004); La ciudad como texto cultural. Camagüey 1514-1837 (2005); Una ciudad en el laberinto de la ilustración (2009) y La cofradía de los signos urbanos (2012). Premio Especial Roberto Balmaceda (Uneac, 2002), Juan Marinello (2006), Juan Torres Lasqueti (2005, 2010, 2011 y 2012), Ensayo Histórico Enfoque (2007), Crítica Histórica José Luciano Franco (2005), Publicaciones, teoría y crítica en el V Salón de Arquitectura (2005) y Jorge Enrique Mendoza (2004), entre otros.

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